viernes, febrero 10, 2017

Derecho a aprender toda la vida

 La Ley General de Educación vigente, considerando el informe Delors de la UNESCO La educación encierra un tesoro en 1996, en la Declaración Mundial sobre Educación para Todos de Jomtien en 1990, en la CONFITEA V de Hamburgo en 1997 o en el Foro Mundial de Dakar en 2000, entre otras referencias, determinó que la educación tiene como finalidades lograr la realización ética, intelectual, artística, cultural, afectiva, física y espiritual, promoviendo el desarrollo de la identidad y autoestima, así como la integración social adecuada y crítica, para construir una sociedad democrática, solidaria, justa, inclusiva, próspera, tolerante y forjadora de una cultura de paz.

Estas finalidades deben ser alcanzadas mediante una educación que tenga como principios considerar a las personas como centro y agentes fundamentales de un proceso educativo ético, con equidad, inclusión, calidad, democracia, interculturalidad, conciencia ambiental y creatividad e innovación, que promueven la producción de nuevos conocimientos en todos los campos del saber.

Alcanzar dichas finalidades mediante una educación basada en principios implica que todas las personas tienen el derecho a una educación durante sus vidas, en los servicios educativos públicos y gratuitos, gestionados descentralizadamente y como una acción intersectorial. De este modo, el currículo se define como valorativo, porque fomenta la ética personal y ciudadana; significativo, porque tiene en cuenta las experiencias, saberes y necesidades de los estudiantes, y participativo, porque como herramienta pedagógica debe estar centrado en las personas como agentes fundamentales del cambio, en un proceso de enriquecimiento permanente.

La EBA surge con los mismos objetivos y equivalencias de la EBR, pero enfatizando su orientación hacia el trabajo y las capacidades empresariales mediante formas de atención flexible basadas en el autodesarrollo, como se afirma en el acápite sobre la alfabetización.

La EBA, desarrolla una educación para niños y adolescentes, así como para jóvenes y adultos, como reto de un proceso que atiende el derecho de las personas a educarse durante toda la vida, dentro y fuera del sistema educativo formal, en una perspectiva de desarrollo de ciudadanía basada en la trasformación de las personas y de sus entornos sociales. La EBA es una respuesta a la realidad de miles de peruanos y peruanas que desean formarse y acceder al mundo en mejores condiciones que la exclusión ha dejado.